Regreso. Siento la tardanza. No ha sido por ganas.
Ha sido un verano intenso, cargado de aprendizajes, y no lo digo por las niñas.
Lo digo por mí.
Como bien sabéis no era partidaria de escolarizar a mi hija antes de los seis años y, tras los seis años, tampoco veía la necesidad de entregarla a un centro educativo. La lógica y la intuición, además de la experiencia en otros países, me hacen pensar que no es una buena idea.
Además habíamos decidido que nuestra familia es y será una democracia participativa, esto es, que cada un@ toma sus decisiones libremente siempre que respete a l@s demás. Read More